La Red de Investigadores del Banco Central de Reserva de El Salvador (REDIBACEN), presentó a sus miembros la investigación “Cambio Estructural: Recomendaciones de políticas públicas para el crecimiento económico inclusivo en El Salvador”. Los resultados de la investigación fueron expuestos por sus autores, licenciados Pablo Amaya y César Alvarado, ambos del Departamento de Investigación Económica y Financiera del Banco Central.
Los autores del estudio al analizar los síntomas de los problemas estructurales de la economía salvadoreña consideraron necesario orientar las soluciones en base a las mejores prácticas de cambio estructural que otros países han llevado a cabo con éxito y los ha conducido al crecimiento inclusivo y sostenido, agregó la fuente.
El objetivo de la investigación es proponer una solución al estancamiento estructural de la economía salvadoreña, la baja acumulación y productividad del capital, el traslado de recursos de las actividades más productivas hacia las menos productivas y la pérdida de competitividad, provocando un impacto negativo en sectores estratégicos que genera ingresos reales deprimidos, ralentizando la demanda del sector privado.
Para este estudio los investigadores tomaron como base una metodología utilizada a nivel internacional, en la que se utiliza la semejanza o diferencia que existe entre los bienes en términos de los recursos y capacidades que se requieren para su producción, que se utilizan para explicar el tránsito de las economías hacia el crecimiento económico inclusivo y sostenido.
Los principales indicadores de diversificación y sofisticación de la producción indican que El Salvador está especializado en la producción de bajo valor agregado, con una cesta de bienes poco diversificada y fácilmente imitable.
En cuanto a las mejores prácticas realizadas en materia de cambio estructural se ha tomado como referencia a algunos países del sudeste asiático, los cuales han realizado un profundo cambio estructural hacia la diversificación y sofisticación de su producción; asimismo, han transitado de niveles de renta per cápita similares a los de los países centroamericanos hasta llegar a convertirse en países desarrollados con elevadas rentas per cápita.
Las recomendaciones de políticas públicas que plantea la investigación se realizaron en tres grandes ámbitos:
- En materia de planificación del desarrollo es necesario crear instancias permanentes de diálogo entre Gobierno y sector privado; apoyar los sectores productivos estratégicos identificados, crear normativas e instituciones que fomenten la producción, investigación y el desarrollo tecnológico;
- En materia de desarrollo de capacidades productivas se recomienda la creación de parques industriales, financiamiento en condiciones favorables, diversificar la matriz energética, educación y capacitación en carreras técnicas relacionadas a los sectores estratégicos; y
- En materia de logística y estrategias de mercado es necesaria la simplificación de trámites relacionados a las exportaciones, impulsar una campaña de fomento del consumo local y disponer de información para el sector empresarial del país sobre nuevos mercados y productos con ventajas competitivas.
En relación a esto último, los investigadores informaron que se pueden aprovechar las bases de datos de comercio exterior para la planeación estratégica de las empresas, ya que permiten identificar destinos potenciales para sus exportaciones y realizar un análisis de demandas no cubiertas, especialmente con países con los que actualmente ya se tienen acuerdos comerciales.